
Seguir tu pasión tiene trampa
Chico trabaja en empresa. Chico quiere ser libre, disponer de su tiempo y no tener jefes.
Chico coge excedencia del trabajo e inicia un blog que pueda servir de plataforma para su marca personal y quizá para ganarse la vida.
Con el tiempo ve lo arduo de la tarea lo cual no es una sorpresa a no ser que creas en los Reyes Magos.
Habrá emprendedores que conseguirán eso tan deseado de ser rico en tiempo pero otros no conseguirán esa meta y la mayoría puede que ni para ti ni para mi. Estos últimos quedarán atrapados en un negocio que les roba mucho tiempo y energía y tampoco les hace ricos en tiempo y dinero.
Quizá se pregunten ¿para esto dejé mi trabajo? ¿esto buscaba cuando arranque este negocio?
Pero este post no va de cuestionar la bonita aventura de emprender sino de la posibilidad de que hayamos caído en una trampa.
Los de mi generación quizá hayáis oído lo de contra Franco vivíamos mejor. Nota: Franco fue un señor que gobernó España con un poder casi absoluto durante 40 años.
Tener al enemigo identificado confiere mucho sentido a muchas acciones. Un jefe tirano puede propiciar una dialéctica de lucha ya sea sindical o de puro desahogo en la barra de un bar. Si llegas a un pacto contigo mismo el jefe es el malo. Externalizas la culpa porque eres una víctima y de ahí a buscar la huida hay un paso: emprender.
En la lógica de la emprendeduría tu eres responsable de tus acciones y por tanto tanto de tus éxitos como de tus fracasos.
Determinados tipos de coaching y el pensamiento positivo que nos sobrevuela nos sitúa como actores principales de nuestro cambio con un lema en ocasiones perverso, “tú puedes”, “no hay límites”o “los límites te los marcas tú”.
Pero doy por hecho que todos asumimos que es no es del todo así.
Si mi pasión es cantar ópera pero no me acompañan unas condiciones naturales para ello, acabar cantando la Traviatta en el Liceo es poco probable.
Pero quizá mi proyecto no sea tan descabellado y atisbe la posibilidad de lograrlo.
Y la pregunta del millón. ¿Esto es realmente mi propósito o estoy viviendo a través de un objetivo que fue diseñado por otros?
Pongámonos conspiparanoicos.
Byung-Chul Han en su libro Psicopolítica ya nos habla de que lo verdaderamente libre en esta sociedad es el capital y que los ciudadanos son esclavos con el objetivo de acapararlo.
Nos habla de como la psicopolítica sería la nueva técnica de control del poder que se alimenta del Big Data.
A través del anonimato de nuestra navegación en la red nos sentimos libres pero vamos marcando un rastro que se retroalimenta dirigiéndonos de forma inconsciente hacia los intereses de otros.
Cuando inicias una navegación en Internet sabes donde empiezas pero no siempre dónde acabas ni lo que acabas por consumir tanto de productos como de la información que digerimos.
Un ejemplo muy claro sería una estrategia de marketing llamada el retargeting consistente en esos anuncios de productos/marcas que te van persiguiendo allá por donde navegas y que no son sino el eco de tus anteriores visitas.
¿Y si todo esto de la emprendeduría no es será una nueva burbuja en la que estamos atrapados? Alguien empezó a hablar de ello, de buscar tus sueños y este tema se ha retroalimentado en la red ad nauseam.
Así oímos a menudo que en la vida todo tiene su momento. Y se nos anima a dejar de lado una sana conciliación familia-amigos-pareja-laboral adecuada ya que puede ser poco factible para ese emprendedor, para un opositor a notarías o para arranca una consulta privada.
Quizá sea así pero puede que ese sacrificio de las horas que dedicas a la familia (pareja, amigos…) en pos de las que dedicas a ese sueño a lo mejor no tiene fecha de finalización.
Si así fuera estaría muy bien pero en ocasiones habremos apostado por un camino sin final y estaremos aplazando “vivir”de forma indefinida.
Puede que la frase que resuma la actividad de algunos (muchos) emprendedores en Internet sea que se pasó la vida trabajando para conseguir dejar de trabajar. Sería la particular versión internaútica de la carrera de ratas.
Por si no os ha quedado clara la idea introduciremos un concepto asociado que descubrí hace poco: el coliving.
Sería el siguiente paso en la disolución de los límites del trabajo y la vida personal.Que no quieres taza, pues taza y media. Te rodeas de un montón de chalados como tu para sacar adelante tu sueño y aparcas todo lo demás (reconozco que extremo el discurso)
Quizá recordéis esa frases inspiradoras como elige un trabajo que te guste y nunca más tendrás que trabajar. Tiendo a pensar que esta frase es creída proporcionalmente a lo poco que te gusta tu trabajo actual.
No sé a vosotros amiguetes pero toda esta historia tiene un tufillo a esa ética calvinista del trabajo y pesar de que la disfracemos de comunas de emprendedores que viven juntos en amable buenrollismo no lo acabo de ver. Por cierto el rollo happyemprendedor se suele desintegrar si la pasta no fluye.
¿Qué creéis? ¿Hay una burbuja en esto de la emprendeduría? ¿Nuestros propósitos son realmente nuestros? ¿El famoso discurso de Steve Jobs en Stanford fue mal entendido?
Me encantaría leer vuestros comentarios y por favor, compartidlo si os ha gustado.
Hola Dr. Arceaga 😉
Como siempre, tus artículos son únicos.
En concreto este creo que tendrá cola… Hace mucho tiempo que me planteé el “tufillo” que había tras la premisa “vive de tu pasión”. Y soy psicóloga y coach y me encanta el pensamiento positivo.
Pero todo tiene un límite.
Si todos viviéramos de nuestra pasión habría millones de cantanes, artistas, pintores, escritores, jardineros… Pocos querrían ser basureros, dependientes de restaurantes de comida rápida o trabajadores en una sexadora de pollos.
Seamos realistas, esos trabajos son necesarios, y para eso la sociedad se encarga de crearnos la necesidad del dinero. Porque desde hace unos años a esta parte hace falta el doble de dinero para vivir.
Cuando yo era pequeña sólo trabajaba mi padre y éramos tres churumbeles. Ahora tienen que trabajar los dos cabezas de familia para llevar adelante una familia con un hijo o dos a lo sumo. ¿Casualidad? No creo, creo que todo está muy pero que muy bien pensado.
Soy conspiranoica como la que más y el Big Data me quema la sangre. Pero como no puedo competir con Google sino hacerme su amiga, lo que haré será actuar en mi pequeña parcela. Intentaré llevar una vida lo más plena y digna posible.
Gracias por remover conciencias. ¡Un abrazo!
No sé que removeremos amiga pero vaya por delante que valoro mucho el curro y las ganas que destilas en tu blog.
Mira que no soy de halago fácil pero amig@s yo me daría una vuelta por el blog de la señorita Vico y si vas dando tumbos por la vida -por otra parte algo a veces inevitable- quizá ella sea tu interlocutor.
Un abrazo y gracias por tu amable comentario!!
Muchas gracias por el piropazo 😀
Cuando quieras tienes las puertas abiertas de mi blog 😉
Eso sí que me quema a mí la sangre, que ahora haga falta tener 2 trabajos para criar a los hijos. Pero no me extraña, porque ha subido mucho lo que le exigimos a la vida.
Cuando yo tenía 10 años, la diversión del fin de semana era ir con mesa plegable a la Casa de Campo (en Madrid) y con los filetes empanados en la tartera. Allí corrías, trepabas árboles, ibas en bici y jugabas con ramas caídas. El verano, al pueblo con los abuelos, y el calor se soportaba echándonos agua sacada del pozo. Al cine íbamos cada 3 meses o así, cuando salía una de Star Wars o de Disney.
Ahora hay varias películas infantiles siempre en cartelera, las palomitas se venden a precio de caviar, la piscina de bolas ha sustituido a las encinas de la Casa de Campo, y si no viajas a la playa al menos 1 semana en verano te sientes desgraciado. Money money money!
Es posible que muchos se sientan desgraciados si no “emprenden” algo o si fallan en su iniciativa. Yo voto por nadar y guardar la ropa, siguiendo mi instinto en nuevos proyectos sólo si me apetece mucho. El último empujón para atreverme a hacer cosas me viene muy bien, porque soy excesivamente analítica. Si al final no obtengo beneficio económico, al menos tendré recompensa emocional.
¡Saludos!
Hola Almudena,
Muy razonable ese mix de sentido común+proyectos que apetezcan en paralelo.
Un abrazo y mucha suerte!!
Buenos días a ambos, contesto sobre el comentario de Ana porque me resulta interesante que coincida por las vías en las que estaba pensando (pero en sentido contrario).
Por un lado, Franco fue un dictador (como corrección a un artículo maravilloso)
Y, por otro: No, nadie parece querer ser barrendero. Curiosamente, cuando todo el mundo se dedique a lo que le gusta, y agrego, sea cívico, los barrenderos no serán un elemento social necesario en nuestras calles.
Os sorprendería la cantidad de gente cuya pasión es la de diseñar pequeños vehículos que se encarguen del mantenimiento de las vías públicas.
Yo vivo de mis dos pasiones (la ingeniería y la escritura) y puedo decir que “he sido liberado” del maltrato de un jefe. ¡Y tengo dos! Pero los he elegido yo, son tipos bastante agradables la mayor parte del tiempo, que me escuchan, me apoyan y a quienes mis ideas locas les parecen trampolines por los que tirarse.
Creo sinceramente que este es el único momento de la historia (debido a la posible liberalización de los trabajos físicos que realizarán los robots) en el cuál todos podemos empezar a dedicarnos a lo que queremos.
Claro, que en mi opinión nunca hay suficientes personas formadas, ni suficientes artístas 😉
Un placer leeros.
Gracias Marcos,
El tema es polemizar. A veces podría sostener una opinión y la contraria, pero lo más interesante es ver lo que piensa la gente sobre algunos temas controvertidos que a veces tiene más de una cara visible.
Los que en cualquier caso nos alegramos de que sigas tu pasión somos tus lectores que esperamos nuevos textos después del magnífico Haz algo diferente. Ver en http://lapiedradesisifo.com/2015/04/17/haz-algo-diferente-de-marcos-martinez/
Un saludo y un honor que hayas escrito aquí!!
Hola, Dr. Arcega.
El éxito empresarial pertenece a unos pocos. Es ley natural y universal. En el universo no existe lo justo.
Es como si en la época de Henry Ford se planteara el fenómeno de fabricar coches como un emprendimiento viable. Sencillamente pocos pudieron aprovecharlo aunque generó mucha riqueza.
Con el emprendimiento en Internet pasa igual. Las riquezas les llegarán a unos cuantos. Los demás sobreviviremos unos más felices que otros. Unos sacrificando más que otros. Pero como con todo en la vida. Incluso dentro de una empresa como empleado están los que lo dan todo (familia incluida) y aquellos que saben que su trabajo es el medio para hacer que su familia lleve una vida digna.
Todo es relativo. Lo que está claro es el libro “La Semana Laboral de 4 horas” ha hecho mucho daño. Sobretodo a personas jóvenes y soñadoras … pero vamos … que también incluyo La Voz, Tu sí que vales, y todos esos programas que alimentan ilusiones. Pero bueno … de ilusiones también se vive.
Yo prefiero ceñirme a realidades y disfrutar del camino. Sin perder el norte ni la ilusión de que puedes ayudar a ser el mundo mejor y llevar la vida que deseas. No es tan dificil.
Un abrazo.
Gracias Javier,
Como no podía ser de otra manera también de acuerdo con tu reflexión.
Mi post es un aviso para navegantes pero no pretende desanimar al viaje.
Saludos!!
¡Hola! Enhorabuena por estas reflexiones tan necesarias y por tu blog.
Es curioso. Cuando he leído este escrito ha sido una conexión tremenda. No somos los únicos que piensan como nosotros, eso está claro, pero me encanta la sincronía de nuestro pensamiento.
Aquí te dejo un escrito que dejé en mi muro de Facebook la semana pasada.
Un saludo
Burbujas en el aire
Las burbujas son porciones de aire, u otro gas, envueltas en una fina película de líquido o formadas en el interior del mismo, que tienden a elevarse.
Bajo esta definición, puede entenderse en lo que la palabra emprendimiento se ha convertido.
Las porciones de aire son todas aquellas iniciativas con ánimo de lucro que prometen la difusión de tus ideas a cambio de emprender tu dinero.
Es decir, pagando.
Son la ingente cantidad de “motivation conferences”, “networkings”, “speed-datings”, “online-courses” y “elevator pitches”.Palabras anglosajonas revestidas de posmodernismo en el mundo del big data, el universo del colapso.
La fina película de líquido son todas aquellas frases de azucarillo, adornadas con bonitos paisajes de fondo que envuelven a ese aire que contienen.
Persigue tus sueños. Es decir, paga para poder tenerlos.
No te detengas.Es decir, paga para no reflexionar sobre tus decisiones.
Que si, que se aprende y se conoce. No digo que no.Pero en ese océano de (in)finitas posibilidades que nos venden, hay tiburones acechando a los pequeños peces que nadan hacia su incierto destino.
Así que te animo a que emprendas sin perseguir sueños, sino realidades.Y deseo que te detengas a reflexionar sobre si realmente te conviene o si, en esa búsqueda urgente, tus decisiones están motivadas por conveniencias ajenas.
Que si, que emprendas si puedes y quieres.
Pero no inviertas demasiado tiempo y dinero en las fábricas de lo ilusorio.
En el emprendimiento del emprendimiento.
En la mentira de que es el único camino.
Muy de acuerdo… “Así que te animo a que emprendas sin perseguir sueños, sino realidades”
Perseguir realidades ya es soñar bastante.
Muchas gracias por comentar Alvaro!!
Hola, José Manuel!
Al habla una compi de tribu 😉
Tu artículo me parece que viene muuuuuuy a cuento en esta burbuja de emprendimiento que yo considero que SÍ existe.
Sin embargo, creo que el emprendimiento, por muy burbuja que sea, viene bien en los tiempos que corren ahora en España. Y creo que es útil porque las ideas que trae todo este tema de montar algo por nuestra cuenta no sacan de una comodidad y de un inmovilismo en el que estábamos metidos hasta el cuello y del que no nos dábamos cuenta hasta que vino la crisis.
Está claro que no hay mercado para tanto emprendedor y que muchos se la van a pegar por el camino. Pero en eso consiste: en pegársela e ir aprendiendo poco a poco qué queremos y cuál es nuestro lugar en el mundo.
Dices que “en ocasiones habremos apostado por un camino sin final y estaremos aplazando “vivir” de forma indefinida”. Para mí, por ejemplo, “vivir” es recorrer ese camino sin final: no saber qué va a pasar después, qué aventura habrá detrás de la esquina. Por eso pienso que, en realidad, todo depende de la idea que tengamos de lo que es la vida. Y esta burbuja del emprendimiento, por encima de todo, nos ha hecho cuestionarnos lo que pensábamos de la vida, ¡y eso ya es un gran logro!
Muchas gracias por tu artículo. Nos leemos!!!
Gracias por tu reflexión!!
Nos leemos.
Hola Doctor Arcega,
Soy una de esas que sigue su pasión y por eso tu artículo me ha parecido muy oportuno.
Creo que SEGUIR LA PASIÓN TIENE TRAMPA pero el truco está en no caer en ella y ser siempre realista. Eso de hacerse rico con un blog, sin trabajar y sin esfuerzo … como que no. Pero por otro lado, creo que emprender en salud es una estrategia que ha funcionado en otros países, aquí no estamos acostumbrados, porque afortunadamente “hay” o “había” un buen sistema público de salud. Pero es como todo, hay quienes tienen la fortuna de tener una plaza pública para siempre y a otros que nos toca buscar otras salidas. Personalmente, prefiero un mundo con las dos posibilidades.
Me gustó mucho tu artículo. Compartido queda!
Totalmente de acuerdo. Animo!!